11.- Entrega total

Todas las noches la luna brillaba intensamente en Tierra Caliente, pero en esta ocasión tenía un resplandor rojizo... el calor era aún más fuerte en el pueblo y en la habitación de una posada dos cuerpos ardían en llamas... eran Emmanuel Montenegro y Andrés Duarte...
El pelioscuro besaba ardientemente los labios del rubio introduciendo toda su lengua en la cavidad bucal del más joven mientras que con sus manos recorría toda su anatomía centrándose en las carnosas y bien formadas nalgas del chico de los ojos de miel...
Andrés dirigió sus labios al cuello de Emmanuel y más que besarlo lo marcaba dejándole huellas de sus besos en esa blanca piel...
El rubio sólo gimió levemente ante esas caricias: ah ah...
A: ¿estás seguro que quieres hacer esto? dilo ahora porque llegará un momento en que ya no pueda detenerme...
Emmanuel dudó por unos segundos para decir con voz firme: sí, estoy seguro... te amo y te deseo...
Los ojos cafés de Andrés brillaron por la lujuria y sin esperar más comenzó a despojar al ojimiel de su ropa... al quitarle la camisa, el pelioscuro vio ese delicioso pecho con botones rosados... las tetillas de Emmanuel eran una invitación al pecado...

Andrés lamió el pecho del más joven percibiendo como el corazón de este latía agitadamente ante las caricias que recibía... el pelioscuro mordió y succionó la tetilla izquierda provocando otro leve gemido del rubio...
A: sabes delicioso...
Emmanuel no contestó nada, sólo cerró los ojos rindiéndose al placer... sintió como Andrés lo empujaba para caer en la cama sin que él dejará de morder sus pezones...
Las manos del hombre no se detenían tocando soezmente ese cuerpo que resultaba una tentación para cualquiera... el pelioscuro desabrochó el pantalón de Emmanuel y se lo quitó lentamente dejándolo sólo en un bikini de color blanco...
Andrés se relamió los labios al ver esa sensual figura semidesnuda en su cama... Emmanuel vio cómo el hombre lo miraba con ojos cegados por el deseo y a pesar de ser un chico de carácter fuerte se sintió intimidado... se sentía como un conejo a punto de ser devorado por un león... no se podía ni mover...
El barbado hombre sonrió al ver el nerviosismo del más joven y se lanzó sobre él para despojarlo de la última prenda que le quedaba... Emmanuel se sonrojó al verse totalmente desnudo y expuesto ante Andrés, por lo que intentó cubrir su intimidad...
A: no te avergüences, eres más bello de lo que pensaba... desearía verte siempre así, desnudo...

El hombre volvió a besar el pecho de Emmanuel, pero esta vez fue descendiendo lentamente dejando una hilera de besos hasta llegar al miembro del rubio que palpitaba por la excitación...
Andrés tomó el pene del ojimiel y lo metió a su boca para chuparlo...

Emmanuel echó su cabeza hacia atrás hundiéndose en la cama mientras sentía el placer de que el hombre que amaba le estuviera haciendo sexo oral...
Por varios minutos, Andrés degustó lujuriosamente el sabor del rubio provocando jadeos en el inexperto joven...
E: ah ah ah ah ah... oh Andrés ah ah ah...

El pelioscuro sonreía, pues sabía que ya tenía en sus manos a ese chico, lo estaba volviendo loco llevándolo a la cúspide del placer...
E: ah ah ah... siento que voy ah ah...
De pronto, Andrés se detuvo y se levantó de la cama provocando que Emmanuel con el rostro enrojecido lo viera con mirada interrogante...
E: ¿qué pasa?
A: nada, sólo estamos comenzando...
El barbado no dijo más y se quitó la toalla que tenía envuelta en la cintura dejando ver todo su cuerpo desnudo... el rubio se sorprendió al ver la imponente verga de Andrés en todo su esplendor... además de una gruesa virilidad se observaban unos huevos grandes y cargados de leche por la excitación...
El pelioscuro sonrió cínicamente ante el gesto de Emmanuel... era obvio que esta era la primera vez que el rubio veía a un hombre completamente desnudo...

Con voz ronca, Andrés preguntó: ¿te gusta lo que ves?
Sonrojado el ojimiel sólo asintió mientras que el ojicafé se echó sobre él para devorar nuevamente su boca... el barbado tomó la mano del más joven y la dirigió a su pecho...
Emmanuel recorría con su mano ese velludo pectoral que estaba firme y duro como una roca... Andrés hizo que la mano del rubio bajara por su abdomen hasta hacer que tocara su hinchada verga...
El ojimiel se sobresaltó al sentir el miembro del macho y retiró la mano rápidamente...
A: no te asustes... vas a disfrutarlo cuando esté dentro de ti...
Temblando, Emmanuel dijo: A-Andrés...
A: shhh... ahora necesito que me prepares para entrar en ti...

El rubio abrió aún más sus ojos sin entender qué es lo que su hombre quería que le hiciera...
**********

Mientras tanto en casa de Juan y Tadeo, Mateo lloraba ante Tommy, quien fingía preocupación por lo que le pasaba al castaño...
M: por favor Tommy, no digas lo que me pasó a nadie... me moriría de vergüenza si supieran que yo... que yo...
T: no te preocupes amigo... obviamente yo no diré nada... estoy seguro que el maldito de Lucas no volverá a molestarte, después de todo ya consiguió lo que quería...
Con el rostro bañado en lágrimas, Mateo dijo: sí, ese desgraciado me arruinó la vida...
T: oye, pero tus papás tampoco saben nada ¿verdad?
M: no, no les he dicho...
T: y será mejor que no lo hagas... imagínate lo que haría tu papá... provocarías otra desgracia... mejor quédate callado...
M: sí, no voy a decir nada...
T: y tampoco se lo cuentes a Emmanuel... ya ves cómo es él... no tiene respeto por nada ni nadie...
M: ¿por qué dices eso?
T: ay Mateo, no sé cómo decírtelo, pero creo que debes estar enterado de lo que está pasando...
M: ¿a qué te refieres?
T: a que Emmanuel está coqueteando descaradamente con Pablo... hoy aprovechó que tú no estabas para estar con él y yo los vi muy cerca uno del otro...
M: p-pero Emmanuel no es capaz de...
T: abre los ojos Mateo... Emmanuel es un descarado... a él sólo le gusta jugar con los chicos y ahora quiere hacerlo con Pablo a pesar que sabe que tú y él...
M: no sigas por favor Tommy... no me digas más... en todo caso Pablo y yo no somos nada...
T: pero a ti te gusta Pablo ¿verdad?
M: eso ya no importa... después de lo que me pasó ya no puede haber nada entre nosotros...
Tommy no pudo disimular una sonrisa de satisfacción y dijo: tienes razón, Pablo ya no podría tomarte en serio, en realidad ningún hombre podrá hacerlo...
Las palabras de Tommy hirieron aún más el corazón de Mateo...
T: pero de cualquier forma lo que Emmanuel te está haciendo es una traición... y para que compruebes que no es mentira, mira, tomé estas fotos a la hora de la salida...
Mateo vio las fotos que Tommy le mostraba de su celular... en ellas se veía a Emmanuel y Pablo abrazados...
T: lo ves, ahora sí crees que Emmanuel es de lo peor...
Mateo no sabía qué contestar y en esos momentos, Tommy tuvo un ligero mareo, que no pasó desapercibido por el castaño...
M: ¿qué te pasa Tommy? ¿te sientes mal?
T: n-no, no es nada... sólo me mareé, pero es porque hoy no comí bien... bueno creo que mejor me voy... ya es un poco tarde... nos vemos en la escuela Mateo... bye...
En cuanto Tommy salió, Mateo se quedó triste y pensativo... se negaba a creer en que Emmanuel le estuviera traicionando con Pablo ¿realmente era verdad todo lo que decían de su primo?... el castaño estaba muy lejos de imaginar lo que Emmanuel hacía en esos momentos...
**********

En la posada del pueblo, Andrés y Emmanuel continuaban con su danza amatoria...
El barbado se sentó con las piernas abiertas enseñando orgullosamente su potente longitud e hizo que Emmanuel se arrodillará ante él...
A: chúpala como yo hice contigo... necesito que la prepares para hundirme en ti...
E: p-pero y-yo no sé cómo...
A: sólo métela en tu boca y chúpala como una paleta... sé cuidadoso para no morderme...
El rubio asintió y con manos temblorosas tomó el grueso miembro observándolo detenidamente... mentalmente se preguntó si sería posible que todo eso entrara dentro de él... sin duda le causaría mucho dolor...

Cuando acercó su rostro a la verga, sintió el aroma a macho en brama provocando extrañas sensaciones en su estómago...
A: hazlo ya... no aguanto más...
Emmanuel obedeció y metió poco a poco la longitud dentro de su virginal boca provocando que Andrés gruñera de placer... por primera vez, el rubio disfrutaba del sabor de un macho... su boca se llenaba de un único y delicioso sabor cargado de lujuria...

A: oh, sí así Emmanuel... síguela chupando así...
El rubio lamía y ensalivaba el miembro del macho sintiendo que esa longitud le llegaba hasta la garganta y le provocaba arcadas... intentó retirarse, pero el pelioscuro tomó la cabeza del chico para que no dejara de mamarle la verga...

Lleno de placer, Andrés vio a Emmanuel sometido ante él... así es como deseaba tenerlo pues desde hace muchas noches que no dejaba de soñar con ese bello cuerpo... entonces, el pelioscuro se ensalivó dos dedos y agachándose un poco empezó a sumergirlos en el culo del más joven...
El rubio se respingó al sentir la intrusión, pero no dejó de chupar los huevos del macho... en tanto Andrés metía con dificultad sus dedos en esa cerrada abertura anal...

En ese momento, el macho comprobaba que Emmanuel realmente era casto: así que sí eres virgen... todo eran habladurías de la gente...
Emmanuel dejó de chupar el miembro y dijo: sí... yo nunca he hecho el amor con nadie...
Andrés tomó del mentón al rubio y le dijo con voz seductora: gracias por elegirme a mí para ser tu primera vez...
El rubio sólo sonrió tímidamente... el pelioscuro aprovechó para levantar al ojimiel y colocarlo sobre él en cuclillas...
E: ¿qué haces?
A: como eres virgen será mejor que tú te autopenetres para que sea menos doloroso...
El pelioscuro colocó su verga en la entrada de Emmanuel y le dijo al oído: sabes cómo un chico como tú se convierte en una hembra de verdad...
Tragando saliva, Emmanuel preguntó: ¿cómo?
A: recibiendo a un macho en su interior... yo soy ese macho y a partir de hoy tú serás mi hembra...
Sin decir más, Andrés puso sus manos en la cintura de Emmanuel para presionarlo a irse ensartando él solo... el rubio sintió cómo la punta de la verga del ojicafé se introdujo de golpe en su estrecho agujero...
Los ojos de Emmanuel se abrieron grandemente por el dolor y gritó: aghhhhhhhhhh....

A: sólo entró la cabeza aún falta todo lo demás...
El ojimiel tocó con una de sus manos el descomunal falo y entre gemidos dijo: es muy larga... aghhh no va entrar...
A: por supuesto que sí... vas a recibirla toda en tu interior... sólo así serás completamente mío...
Emmanuel hacía muecas de dolor sintiendo que era partido en dos... Andrés forzaba a que el chico se fuera sentando aún más sobre su larga virilidad para llegar hasta el fondo del más joven...

Con lágrimas en los ojos, el rubio sentía a esa boa de carne abrirse paso en sus adentros... sentía cómo su estrechez era ampliada de una manera cruel...
El pelioscuro también sentía a su verga ahorcada por ese pequeño orificio... sin embargo él no sentía dolor sino placer... el placer de desflorar a un inocente y quedarse con lo más puro de una persona...

A: estás jodidamente estrecho... se siente tan delicioso abrirte por primera vez...
El rubio casi no escuchaba pues el dolor en su entrada era más fuerte, de pronto sintió cómo Andrés se apoderaba de sus labios besándolo apasionadamente... esto provocó que el chico se excitara aún más y su entrada se dilató permitiendo que la verga del macho se fuera hasta el fondo...

Emmanuel ya estaba completamente empalado por Andrés y sus nalgas chocaban con los huevos del hombre...
A: ya está... estoy totalmente dentro de ti... ya eres mío...
Llorando Emmanuel dijo: sí, soy tuyo...
En ese momento, Andrés vio cómo de la abertura de Emmanuel escurría un hilillo de sangre manchando su longitud y sus testículos... esa sangre era la prueba de la virginidad de Emmanuel... Andrés Duarte lo había desflorado robándole su inocencia poco antes de cumplir los 18 años...
El pelioscuro sonrió perversamente y desenfundó su espada manchada con la pureza del rubio y la incrustó nuevamente de una manera cruel y sádica...
Emmanuel gritó: aghhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh...

Andrés le susurró al oído: te juro que nunca olvidarás esta noche...
El barbado comenzó con el mete y saca hundiéndose aún más en las entrañas del ojimiel, que sentía desfallecerse por el dolor en su intimidad...

El chico se aferraba a la espalda del macho rasguñándolo para intentar compartirle el dolor que él sentía...
Con voz ronca y excitada, Andrés dijo: aguanta, ya vas a empezar a gozar...
El rubio echó su cabeza hacia atrás mientras sentía sus caderas elevadas en el aire... de pronto la verga de Andrés dio en el punto exacto... en el punto de placer de Emmanuel y este dio un alarido de éxtasis...

E: ohhhhhhhhh...
A: así que ahí está el punto... entonces te voy hacer gozar...

El pelioscuro detuvo sus embestidas para acostar a Emmanuel y él meterse entre sus piernas...

...vio la rojiza abertura del rubio y se hundió haciendo gritar nuevamente al ojimiel... sin embargo, ahora el grito no fue sólo de dolor sino también de placer...
E: ahhhhh ohhhh ahhhh...

A partir de ese momento, el macho ya no se detuvo... daba firmes y salvajes estocadas al culo de su amante que se retorcía de placer ante cada embestida...
El rubio se aferraba a las sábanas mientras mantenía los ojos cerrados...
Andrés ordenó: abre tus ojos... quiero que me veas...
El ojimiel obedeció y observó al ejemplar masculino que tenía encima de él adentrándose en lo más profundo de su ser... Andrés se veía tan macho lleno de sudor y con el rostro desfigurado por el placer... era un semental en brama y Emmanuel una yegua entregándose a la pasión...

El rubio rodeó con sus piernas la cintura de Andrés haciendo que este se incrustara aún más en él... para este momento, el ojimiel ya no sentía dolor sólo el placer inundaba todo su ser...
Andrés gruñía: aggghhh... que delicioso eres... me aprietas como nadie...
Emmanuel lloraba de gozo mientras que su culo recibía en plenitud al macho... su agujero ya se había amoldado perfectamente al miembro de su hombre...
Andrés besó apasionadamente a Emmanuel... mientras sus manos acariciaban el exterior del joven, su verga le acariciaba el interior...

El rubio no aguantó más y de su pene salió el líquido blanquecino anunciando que había tocado la cúspide del placer... sin embargo para Andrés la noche aún comenzaba, por lo que succionó el cuello de su amante provocando que el ojimiel casi perdiera la conciencia...
Desde ese instante, Emmanuel dejó que el macho lo usara para su propia satisfacción... únicamente sus gemidos lo hacían mantenerse consciente y provocando que Andrés lo taladrara aún más fuerte...

Cuando Emmanuel pensó que se desmayaría fue cuando Andrés anunció su corrida...
A: aghhhhh... voy a venirme... pero no quiero dejarte preñado...
De inmediato, la gruesa verga del hombre salió del culo de Emmanuel y comenzó a correrse bañando el pecho y rostro del rubio con caliente y espesa leche...
El ojimiel sintió que el semen del macho era lo último que faltaba para marcarlo como suyo...
Andrés resoplaba como un semental desfogado y después de varios minutos se echó sobre la cama donde Emmanuel estaba desfallecido por el placer recibido...
El pelioscuro limpió las lágrimas de los ojos del rubio y comenzó a darle besos en todo el rostro...

Con voz ronca, Andrés susurró: gracias Emmanuel, me has dado un gran regalo esta noche...
El ojimiel no respondió, sólo cerró los ojos y sintió como el hombre lo abrazaba fuertemente atrayéndolo hacia él...
A: hoy te quedaras conmigo toda la noche... ya eres mío y quiero tenerte así, desnudo y sólo para mí hasta que amanezca...
Emmanuel asintió sumisamente y recostó su cabeza en el velludo pecho de su hombre... el dolor en su trasero comenzaba a hacerse presente...
Con tierna mirada, Emmanuel dijo: te amo Andrés...
Andrés respondió: descansa chiquillo... duerme tranquilo... yo estoy aquí contigo...
Luego de besar los labios de Emmanuel, Andrés lo abrazó y sonrió victorioso de su logro... había conseguido que el ojimiel se entregara a él lleno de amor y ahora podría usarlo a su antojo...
**********

Al día siguiente en la Hacienda Montenegro, Ángel bajaba las escaleras dando de gritos...
Á: Emmanuel.... Emmanuel, ¿dónde estás?
Su hermana Maia contestó: ¿qué pasa Ángel? ¿por qué gritas así?
Á: Maia, sabes dónde está Emmanuel...
M: pues supongo que en su cuarto...
Á: no está ahí... fui a buscarlo y no está... además su cama está arreglada como si no hubiera dormido aquí...
M: ay hermano cómo crees... seguramente se levantó muy temprano y salió...
Á: por favor Maia... hoy es sábado y apenas son las 9 de la mañana... el flojo de Emmanuel nunca se levanta tan temprano...
En ese momento, la puerta se abrió y Emmanuel entró quedando sorprendido de ver a sus hermanos viéndolo fijamente...
E: ¿qué pasa?
Á: de dónde vienes Emmanuel y más te vale que me digas la verdad... contesta...
El ojimiel no sabía qué contestar: y-yo... yo vengo de...
La conversación fue interrumpida por Francoise, que bajaba las escaleras...
F: Bonjour à tous (Buenos días a todos)... Emmanuel, qué rápido regresaste... gracias por hacerme el favor que te pedí...
Á: ¿favor? ¿qué favor?
F: ah, pues... yo le pedí a Emmanuel que fuera al banco para hacer un depósito... era urgente que lo hiciera y pues Emmanuel me hizo el favor... afortunadamente se levantó muy temprano ¿verdad?
Emmanuel entendió que Francoise estaba mintiendo para ayudarlo: ah e-este sí... así es... nunca me levanto tan temprano y menos en fin de semana, pero hoy tuviste suerte y ya quedó el depósito que me pediste...
F: merci Emmanuel...
Ángel tenía dudas sobre lo que pasaba, pero no tenía por qué desconfiar de Francoise: mmm... bueno pues siendo así... vamos a desayunar...
En cuanto Ángel y Maia se fueron al comedor, Emmanuel le dijo a Francoise: mil gracias, te juro que no sabía qué contestarle a Ángel...
F: no me agradezcas... escuché los gritos de tu hermano y supuse que tú en verdad no habías dormido aquí por eso decidí intervenir para ayudarte...
E: ay Francoise si tú supieras... vengo de vivir la noche más maravillosa... tengo que contarte todo...
F: ahhhh... no me digas que tú y tu novio ya...
Emmanuel asintió con un rubor en sus mejillas y el francés abrazó fuertemente al ojimiel...
F: Félicitations (felicidades)...
La conversación fue interrumpida por Maia que regresó para decirles: dice Ángel si van a desayunar ¿o no?
Ambos jóvenes contestaron al unísono: ya vamos...
Francoise le guiñó el ojo a Emmanuel y le dijo: vamos a desayunar... más tarde me contarás todo a detalle...
**********

Al mediodía, Francoise fue al banco del pueblo, pues en verdad necesitaba hacer un depósito... mientras hacía la fila delante de él estaba Abel, el exnovio de Ángel, que lo reconoció de la vez que se lo encontró en el parque...
A: hola...
El francés no recordaba a Abel y preguntó: bonjour, ¿te conozco?
A: no, te vi el otro día que estabas platicando con Ángel Montenegro... tú buscabas una posada para quedarte...
F: oh, sí claro... ya recuerdo... mucho gusto, je m'apelle Francoise Dumont (me llamo Fransua Dumont)...
A: yo soy Abel Linares y dime ¿te estás quedando en la posada del pueblo?
F: ya no... ahora estoy viviendo en la Hacienda Montenegro...
El rostro amable de Abel cambió por un gesto de contrariedad al escuchar eso: ¿cómo? ¿por qué te estás quedando ahí?
F: pues porque tengo una relación con Rafael Montenegro...
A: ¿una relación con Rafael?
F: sí, digamos que somos "amigos"
Abel comprendió a qué se refería Francoise: ah ya entiendo... pues te deseo suerte... ojalá no te vayas del pueblo llorando...
F: ¿por qué lo dices?
A: porque los Montenegro no son personas de fiar y Rafael es el peor de todos... disculpa que te lo diga pero ese tipo es un patán...
F: no te entiendo...
En ese momento, el cajero del banco llamó a Abel para que hiciera su depósito...
A: lo siento, no puedo decirte más, pero cuídate y suerte...
Francoise se quedó lleno de dudas tras esa breve conversación...
**********

En tanto, Mateo se encontraba en su cuarto leyendo un libro cuando alguien tocó a su puerta... era Emmanuel que entró con una sonrisa de oreja a oreja...
E: hola Mateo...
El castaño contestó secamente: hola Emmanuel...
E: espero que ya estés mejor... vine a verte porque tengo algo que contarte... algo maravilloso que me pasó...
M: mira Emmanuel aún no me siento muy bien... mejor ven en otro momento...
El ojimiel notó que su primo no era el de siempre y preguntó: ¿te pasa algo Mateo? ¿estás molesto?
M: no me pasa nada... es sólo que no me interesa escuchar otra de tus aventuras románticas con algún chico...
E: ¿por qué me dices eso Mateo?
M: porque ya me cansé Emmanuel... me cansé de ser el tonto que siempre te escucha mientras tú no eres leal conmigo...
E: ¿de qué estás hablando?
M: de que ya sé que le andas coqueteando a Pablo y no te esfuerces en negarlo porque sé perfectamente que así es... cómo puedes coquetearle sabiendo que él quería conmigo y a mí me interesaba... eres un hipócrita Emmanuel...
E: nada de lo que dices es cierto Mateo...
M: ya te dije que no intentes mentir... no quiero seguir hablando contigo... vete ahora mismo...
El ojimiel se llenó de rabia por la actitud de su primo, pero no quiso discutir: mira Mateo no sé lo que te pasa... pero sólo porque te quiero demasiado no voy a pelear contigo... será mejor que pienses bien las cosas... yo no sería capaz de hacer eso de lo que me acusas...
Mateo no respondió y Emmanuel prefirió irse para no hacer más grande el problema...
**********

Ya era de tarde cuando Francoise regresaba caminando a la Hacienda Montenegro y vio a Ángel cabalgando...
F: Ángel, Ángeeeel...
El musculoso pelinegro vio al francés y se acercó a él...
Á: ¿qué haces aquí?
F: pues salí a hacer unos mandados... me entretuve y se me hizo tarde...
Á: pero ¿pensabas regresar caminando hasta la Hacienda?
F: oh no... estaba a punto de pedirle un "ride" a alguien...
Á: eres demasiado confiado... ven, yo te llevo...
Ángel ayudó a Francoise a subir a su caballo colocándolo adelante de él... el pelinegro no pudo evitar sentir una corriente eléctrica recorriendo su cuerpo al tener tan cerca la anatomía del francés... un dulce aroma se desprendía de él...
F: sabes, hoy me pasó algo curioso...
Á: ¿qué?
F: me encontré a alguien y me dijo algunas cosas que me hicieron dudar...
Á: ¿dudar?
F: sí, yo vine a este pueblo buscando a tu hermano Rafael, pero sé muy poco sobre él... quizás es un error que yo esté aquí...
Á: no te entiendo ¿acaso no amas a Rafael?
F: por supuesto que lo quiero, pero decir que lo amo, no, aún es muy pronto... te repito que lo conozco muy poco... quizás no es el hombre que yo busco...
Esas palabras resonaron en la mente de Ángel y preguntó: y cómo es el hombre que buscas...
F: no lo sé exactamente... sólo creo que debería poder reconocerlo en cuanto lo viera... estoy diciendo tonterías ¿verdad?
Á: no, no es ninguna tontería... yo también creo lo mismo...
F: y tú Ángel... ¿ya reconociste a esa persona?
El pelinegro dudó en contestar: no lo sé aunque creo que ya está muy cerca de mí...
Ángel continuó su camino llevando casi en brazos a Francoise y sintiendo que su corazón latía muy fuerte... deseaba que el tiempo se detuviera para que el francés pudiera estar junto a él para siempre...
**********

En la Hacienda, Emmanuel recibía un gran arreglo de rosas rojas... el ojimiel estaba en la recepción de la casa cuando abrió la tarjeta y la leyó...

"Gracias por regalarme una noche maravillosa... tus besos y caricias se han quedado tatuadas en mi piel... espero que tú pienses lo mismo y nunca olvides lo que vivimos... siempre tuyo, Andrés Duarte"

Emmanuel sintió que su corazón brincaba de emoción y tomó una de las rosas para olerla sensualmente... el momento fue interrumpido por la llegada inesperada de Rafael...
E: ¿Rafael? ¿qué haces aquí?
R: terminé el trabajo antes de lo que esperaba y volví, pero de quién son esas rosas... ¿te las mandaron a ti? ¿quién te las mandó?
El ojimiel mintió: ay obvio que no son para mí... yo sólo las recibí... son de... son para Francoise...
R: ¿qué? pero ¿quién le envía rosas a Francoise?
E: no lo sé... el repartidor no me lo dijo y no hay ninguna tarjeta...
En ese momento, Ángel y Francoise entraron a la casa... el francés se sorprendió al ver a Rafael...
F: ¡Rafael! qué bueno que ya regresaste... pensé que tardarías más...
R: sí, volví y me encuentro con la sorpresa que alguien te está enviando flores...
El francés no entendía nada, pero Emmanuel le hizo un gesto con los ojos para que entendiera que las rosas eran para él...
F: ahhhh... ah sí... p-pues qué quieres que te diga... yo no sé quién me las mandó...
Con mirada inquisidora, Rafael preguntó: ¿estás seguro Francoise?
Emmanuel intervino: ay hermano no te pongas así... Francoise es un chico muy guapo y es normal que alguien le envíe flores...
R: pues a mí no me parece...
El francés se acercó al musculoso rubio y le dijo: vamos... no te vas a enojar por eso... muchos me pueden enviar flores pero el único que me interesa en este pueblo eres tú... eres el único para mí...
Rafael sonrió y besó los labios del francés... Ángel vio esa romántica escena y sin decir más salió nuevamente de la casa...
Ángel manejaba su camioneta a toda velocidad cuando recordó...

Flashback
Era una tarde cuando Ángel y Rafael regresaban de la escuela, el pelinegro tenía 14 años y el rubio 13...
R: ya tranquilízate hermano... no es para tanto...
Á: cállate Rafael... no quiero hablar contigo ahora...
R: pero yo no tuve la culpa...
El pequeño rubio intentó detener a su hermano mayor, pero este lo empujó haciendo que cayera al suelo...
R: eres un menso, ahora verás...
Rafael intentó golpear a su hermano, pero este le detuvo el golpe lanzándole un puñetazo...
La pelea fue interrumpida por su padre Damián, que habló con voz recia...
D: ¿qué está pasando aquí? Ángel, Rafael, deténganse ya...
Ambos chicos obedecieron las palabras de su padre, a quien respetaban y temían...
D: me quieren explicar qué pasa... ¿por qué se pelean?...
Ninguno de los chicos respondía...
Damián insistió: hablen o voy a castigarlos a los dos...
Ángel fue el primero en hablar: pues pasa que Rafael es un mal hermano...
R: eso no es cierto...
D: explíquense... ¿qué pasó?
Á: pues ayer le dije a Rafael que me gustaba un chico de la escuela y hoy él se estaba besando con él...
R: eso no fue así Ángel... yo no lo estaba besando... ese chico se me declaró en el recreo y fue él quien me besó...
Á: eso no es verdad... fuiste tú... eres un mal hermano, un traidor...
R: no lo soy... yo no tengo la culpa de haberle gustado...
D: silencio los dos... dejen de pelear ya... vengan conmigo...
El barbado hombre llevó a sus hijos adolescentes al despacho y viéndolos fijamente comenzó a hablar...
D: yo sé que aún son muy jóvenes, pero pronto serán unos hombres hechos y derechos, por eso deben comprender que en la vida se encontrarán con muchos hombres y mujeres que les gustarán... al tener una edad similar quizás rivalicen por una persona, pero deben entender que por sobre todas las cosas está la familia... ustedes son hermanos y no deben permitir que alguien los separe...
Á: pero papá...
D: déjame terminar Ángel... yo al igual que ustedes alguna vez rivalice con mi hermano mayor por el amor de alguien... eso nos hizo mucho daño y no quiero que algo similar pase con ustedes... por eso quiero que frente a mí hagan un pacto de caballeros... quiero que prometan que pase lo que pase nunca pelearán por una pareja... prométanlo...
Rafael dijo con voz firme: yo sí lo prometo... por encima de cualquier cosa está mi familia...
D: y tú Ángel ¿lo prometes?
El pelioscuro dudó por unos momentos: está bien... yo también lo prometo...
D: muy bien... entonces dense la mano y un abrazo como hermanos...
Ambos adolescentes hicieron lo que su padre les indicaba sellando aquel pacto...
R: te quiero hermano... no me gusta que peleemos...
Á: yo también te quiero hermano y nunca vamos a pelear por alguien...
Fin del flashback

"Nunca vamos a pelear por alguien", esas palabras resonaban en Ángel, que sentía su corazón acongojado... no quería romper esa promesa, pero por más que deseaba no podía quitarse de su mente a Francoise... ese francés se había metido en su alma...
Con rostro desencajado, Ángel llegó hasta la puerta de una casa y tocó el timbre... quien abrió fue su exnovio Abel...
Sorprendido por la visita, Abel preguntó: Ángel ¿qué haces aquí?
El pelinegro entró sin pedir permiso: necesito hablar contigo...
Ab: pero yo no... la última vez fuiste muy claro conmigo y ya no quiero seguir haciéndome ilusiones... además mis papás no están en casa y...
El delgado joven fue interrumpido por Ángel que lo tomó en sus brazos y sorpresivamente lo besó en los labios de manera apasionada... Abel que aún amaba a Ángel correspondió de la misma forma...
Cuando se separó, Abel preguntó: ¿por qué haces esto Ángel?
El pelinegro sólo contestó: no me preguntes nada... ahora sólo te necesito a ti...
Abel sonrió y sintió como el musculoso hombre lo elevó en sus brazos para llevarlo hasta su recámara... ahí el pelinegro hizo suyo nuevamente al muchacho que se entregaba lleno de pasión...
Mientras Ángel se enterraba en lo más profundo de Abel no dejaba de pensar en Francoise... cerraba los ojos y pensaba que quien gemía debajo de él era el francés que lo enloquecía...
Ab: oh Ángel, así... ahhhh ahhhh... te amo... ahhhh...

Abel bramaba de placer ante las embestidas de Ángel que únicamente saciaba sus necesidades sexuales y usaba al joven como un objeto de placer...
***********

Dentro de su habitación, Emmanuel no dejaba de pensar en Andrés cuando su celular sonó y era precisamente su barbado pelioscuro...
E: bueno... ¿Andrés?
Con voz seductora, el ojicafé dijo: hola chiquillo... no podía dormirme sin escuchar tu voz... en mi mente aún resuenan tus gemidos de anoche...
Sonrojado, Emmanuel contestó: Andrés qué cosas dices...
A: ¿acaso tú no recuerdas lo que vivimos?
E: por supuesto que sí... no he podido dejar de pensar en ti en todo el día...
A: me alegra que me lo digas... no sabes cuánto desearía tenerte aquí otra vez y no parar de besarte nunca...
Esas palabras excitaban a Emmanuel: yo también deseo lo mismo Andrés... quiero estar contigo y no separarme de ti...
A: pronto chiquillo... pronto llegará el día en que estemos juntos para siempre...
Emmanuel sonreía pensando que Andrés realmente lo amaba y deseaba estar junto a él...

Una vez que Andrés terminó su llamada con Emmanuel, el pelioscuro le llamó por celular a alguien más...
A: bueno... sí, las cosas van tal como las planeamos... ya tengo a Emmanuel Montenegro en mis manos... muy pronto estaré dentro de la Hacienda Montenegro... pronto consumaré mi venganza y tú vas a ayudarme...

¿Con quién habla Andrés? ¿Cuál será el siguiente paso de su venganza?
En el próximo capítulo están invitad@s a la fiesta del cumpleaños número 18 de Emmanuel.
Continuará...